Historia de las tragaperras y desarrollo de las máquinas recreativas

La historia de las tragaperras comienza en 1887 cuando Charles August Fey, un ingeniero americano de origen alemán, desarrolla la primera máquina llamada “Liberty Bell”. La máquina original se puede ver todavía actualmente en un restaurante de Nevada. Esta primera máquina tiene un modo de juego muy simple. Tiene tres tambores y los símbolos de la suerte son corazones, picas, diamantes, tréboles y la Campana de la Libertad. La peculiaridad principal de esta máquina era que se podía pagar con dinero real. El premio mayor era 3 dólares y se conseguía con tres símbolos de la Campana de Libertad.

Cuatro años más tarde, la empresa de Nueva York, Sittman y Pitt, ha desarrollado una máquina tragaperra diferente. Tenía cinco tambores con símbolos de cartas de juego impresos y su objetivo principal era de obtener la mejor mano de cinco cartas, al igual que el juego de video poker moderno. En contraste con la máquina tragaperra Liberty Bell, el premio de la máquina de poker, no era dinero real sino cigarros o cerveza del bar donde se encontraba la máquina. Con el fin de mejorar la ventaja de la casa, los símbolos de las cartas de la Jota de corazones y el 10 de picas, han sido quitadas. Además, los operadores podían manipular el juego y distribuir cartas con control remoto.

Pocos años después, en los primeros años del siglo 20, ha empezado la producción de las tragaperras de Herbert Mills, llamadas „Operator Bell“. En 1908 esta máquina se podía encontrar en numerosos bares, tiendas de tabacos y salones de juego. Varios años más tarde las slots han sido prohibidas. Pero como gozaban de gran popularidad, los desarrolladores de slots han decidido empezar la producción de las máquinas de frutas. En lugar de dinero, los jugadores podían ganar chicles con diferente sabor de fruta. Por esa razón todavía existen muchas tragaperras con símbolos de frutas como cerezas, fresas, limones, naranjas, uvas y ciruelas. El símbolo BAR era el logotipo del fabricante de chicles Bell-Fruit Company.

La primera máquina de azar electrónica en el mercado es conocida con el nombre „Money Honey“. Ha sido desarrollada en 1963 por la compañía americana Bally Manufacturing Corporation. Aunque se podía operar de manera electrónica, todavía tenía una especie de palanca ya que los jugadores estaban acostumbrados a iniciar el juego de esa manera. „Money Honey“ tenía un premio máximo de 500 monedas. Esta máquina está considerada como el predecesor de las tragaperras de hoy. Desde 1980 las tragaperras electromecánicas han sido reemplazadas por máquinas de juegos electrónicos. Los fabricantes introdujeron también el generador de números aleatorios con el fin de garantizar los resultados aleatorios en los juegos.

En el año 1994 fue desarrollado el primer software de casino y desde entonces empezó una nueva era para la industria de las máquinas de azar. En la actualidad existen numerosos desarrolladores de juegos online y sitios de casino como 888 casino, donde hay amplia gama de tragaperras que están disponibles las 24 horas. Las clásicas maquinas de frutas aún se ofrecen con premios en varias líneas de pago. Pero también hay muchas otras categorías de máquinas tragaperras como por ejemplo los juegos con líneas de pago múltiples, con bote progresivo, las que son 3D, las slots de franquicia. Los temas de los juegos son inspiradores, los gráficos son de alta calidad, los audio efectos son muy realistas. Las mejores máquinas de azar tienen también opciones como rondas de bonificación pero con alto nivel de riesgo. De esa manera los jugadores pueden doblar o perder su ganancia del giro anterior pero así incrementan la diversión en el juego. En los últimos años, cada vez más tragaperras se pueden jugar desde el móvil o la tableta. El juego de azar en el móvil es la última fase en el desarrollo de las tragaperras. Las nuevas tecnologías nos permiten un fácil acceso en los juegos de casino desde el móvil.